En este artículo te contaré sobre cómo preparar una sencilla pasta de maní de forma casera, rica y barata. Es uno de los mejores alimentos por si deseas aumentar masa muscular por su alto contenido en calorías, y su buena ración de proteínas. Lo mejor de todo es que sabrás con que ingredientes está hecho ya que algunos tienen conservantes y algunas otras cosas que desconoces.
En tan solo 15 minutos obtendrás tu pasta de maní lista para el consumo y sobre todo a un precio más barato que el de las grandes tiendas.
¿Quieres hacer este superalimento saludable en tan solo 5 pasos? ¡Vamos a ponernos manos a la obra!
Materiales e ingredientes
- Procesadora o licuadora de 800 – 1200 watts.
- Maní o cacahuate pelado sin sal (depende del país)
Colocar el maní en una placa y tostarlos
Abrir el paquete de maní que compraste, recuerda que debe venir sin sal y pelados. Colocarlos en una placa de horno y mandarlo por 3 minutos a fuego en 180°.
Remover el maní para un tostado completo
Terminado los 3 minutos sacar la placa del horno y mover a los maní para darlos vuelta, de esta manera se logrará un tostado completo. Luego colocar nuevamente al horno y dejar otros 3 minutos.
Enfriar y colocar en procesadora
Una vez sacado del horno hay que dejarlo enfriar a temperatura ambiente. Una vez fríos colocarlo en el vaso de la procesadora hasta un poquito más de la mitad.
Momento de procesar
Procesarlos, esta parte puede llevar su tiempo y es que hay que armarse de paciencia. Triturarlos a una velocidad alta por 30 segundos y luego dejar descansar la maquina unos 2 – 3 minutos. Esto hará que la procesadora descanse para no sobrecalentar el motor. Mover el maní cada vez que se detiene. Realizar este proceso unas 4 o 5 veces hasta lograr la consistencia cremosa.
Conservar en recipiente
Una vez lograda la pasta cremosa, conservarla en un recipiente de vidrio (preferentemente). Se conservará entre 2 – 3 semanas dentro o fuera de la heladera.
¡Aquí lo tienes, en plena acción!
Recomendaciones
- Es importante dejar descansar la procesadora así evitamos cierta rotura de la máquina ya que el maní es un producto duro.
- No es necesario agregarle aceite o agua. El propio maní larga su aceite y hace que la consistencia se haga cremosa.
- Puedes agregarle, mientras vas procesando, algún endulzante Algunos le echan un poco de stevia o miel.
- También puedes jugar con los sabores agregando cacao amargo en polvo, coco rallado, almendras o pequeños trozos de maní dando una consistencia de “crunchy”.
- Ideal para tus desayunos. Puedes untarlo en tostadas por si deseas o arriba de un bowl de avena con frutas. ¡Y si lo combinas con miel será lo mejor!
Ahora ya sabes hacer una pasta de maní casera, rica, saludable y a menos dinero de lo que sale en una tienda.
De ahora en más podrás obtener un gran producto de alto valor proteico y de calidad. Ponte manos a la obra, te aseguro que te encantará y no pararás de hacerlo.